Accidente feliz

Me acuesto todavía con los ecos de los 11 ejes del II Plan de Gobernanza de Cantabria, y reflexionando sobre la importancia del «adecuado impulso político» para transmitir confianza y seguridad a los ciudadanos y conseguir pasar por la actual crisis financiera sin daños significativos, quedando en mejores condiciones cuando el temporal amaine. Esto es hacer POLITICA.

Cantabria sale de la crisis con «nuevas energías renovables». Nuevos «vientos» nos llevan al mar, y el futuro son las olas del mar, el futuro está en el viento, está en el mar.

«Una nueva voz de viento y de sal…y te vas hacía allá como en sueños, querida CANTABRIA, vestida de mar…

….Y si llama ella no le digas nunca que estoy,

di que me he ido.»

El primer Plan de Gobernanza, fue una iniciativa innovadora, necesaria y positiva para el desarrollo de Cantabria. Contribuyó a crear una imagen positiva de Cantabria en todos los foros y a dar seriedad, confianza, transparencia,  método y evaluación a las actuaciones estratégicas que llevo a cabo el Gobierno. Siendo así, resulta obligado plantear la elaboración de este segundo Plan de Gobernanza. Se trata de una herramienta de planificación estratégica y  despliegue de los planes de acción y en este sentido, los ciudadanos se lo debemos pedir a cualquier Gobierno que nos gobierne, especialmente a los de coalición, en donde los programas electorales de cada coaligado no son tan fáciles de llevar a la practica.

Pero claro, es tan interesante el tema, que  decido cambiar de lectura, para poder dormir unas pocas horas; antes de que suene cruelmente mi despertador, a eso de las seis de la mañana, cuando todavía ni siquiera el agua circula por las tuberías.

Me cambio a un libro sobre <<ciencia>> de Francisco Mora titulado «El científico curioso», que me suele servir para pasar diariamente de la vigilia al sueño en poco mas de una página, pero vaya noche me espera. Empiezo con un pequeño articulo titulado como este blog ( disculpa Francisco por el plagio), en el que me cuenta que una profesora de la prestigiosa Universidad de Hardvard, ha concluido, después de un estudio de varios años, que el orgasmo femenino, al contrario del masculino, no tiene propósito alguno en la evolución. «El orgasmo femenino, pues, sería como un accidente feliz, sin un mas allá biológico». ¡Abro los ojos! y empiezo a darle vueltas al asunto y sigo leyendo y empiezo a pensar sobre como hizo el estudio la profesora de Hardvard y como Francisco Mora, le da credibilidad en su libro. ( Francisco Mora es doctor en Medicina y Neurociencias y hasta ahora he estado muy de acuerdo con todo lo que he leído de él.)

Así que empiezo a darle vueltas y comienzo a ver la luz y a entender y en efecto: el orgasmo femenino no es necesario para la función reproductora. Vamos, que la mujer para quedarse embarazada no necesita tener un orgasmo durante el coito, mientras que el orgasmo masculino esta íntimamente ligado a la eyaculación, sin la cual no hay posibilidad de fecundación.

Al final me duermo y al día siguiente, hoy, lo comento con un «médico», mi hermano, y me aporta otra reflexión curiosa: los humanos somos la única especie animal, en donde la hembra puede tener orgasmos durante la «coyunda» .

Y yo me pregunto si esto será así realmente, si será exclusivo de la especie humana. El que quiera dar su opinión sobre cualquiera de los dos temas, un poco mas abajo puede empezar a escribir. ¿Quien sabe los libros que pueden salir de estos dos apasionantes temas?

Nota: Post comenzado el 30-S y terminado el 1-O.